lunes, 22 de septiembre de 2014

NO DIGITALICEMOS EL LIBRO DE TEXTO

Hablábamos de este tema en clase y pocos días más tarde, una amiga muy felina ha compartido este artículo conmigo. ¿Casualidad?

Decididamente, no puedo estar más de acuerdo:

"No digitalicemos el libro de texto


El libro de texto es un error. Un vestigio de una forma de aprender que funcionaba cuando el conocimiento era un bien escaso, que era preciso encapsular en algo físico para poder acceder a él. El libro representaba “lo que había que saber” de un tema, el camino por el que el profesor debía guiarte, o en muchos casos, los textos que tenías que memorizar para luego poder copiarlas en un examen, en el que te evaluaban por tu capacidad de retener datos en la memoria.

A partir de la necesidad de encapsular el conocimiento para ofrecer al estudiante un acceso al mismo, surgieron infinidad de perversiones. Por un lado, un mercado compuesto por miles de estudiantes que compraban aquello que su colegio o institución les decía que tenían o-bli-ga-to-ria-men-te que comprar era demasiado goloso, y el libro de texto se convirtió en un negocio, Un negocio fantástico: el libro tenía que cambiar todos los años, el del año anterior no servía, y las decisiones de adopción del libro de una u otra editorial por parte de un profesor o de toda una institución se convertían poco menos que en negociaciones mafiosas, en auténticos sobornos y presiones de todo tipo. Por otro lado, la posibilidad de controlar de lo que llegaba a aparecer en el libro ofrecía a algunos la megalómana tentación de adoctrinar, de poder decidir qué era bueno y qué era malo, de dar forma a las mentes de los niños cuando estaban en su edad más dúctil y maleable. No hace falta que ponga ejemplos: todos los tenemos."


1 comentario:

  1. Beatriz Martínez10/11/2014

    Me parece súper interesante el artículo y estoy totalmente de acuerdo. Los libros de textos tuvieron su utilidad, pero en en la Sociedad de la Información debemos adaptar la educación a las nuevas necesidades surgidas por el sistema y por el mismo alumnado.

    De nada sirve que el envoltorio siga siendo el mismo, lo que hay que cambiar es la manera de aprender, de enseñar. Debemos de promover el pensamiento crítico, y los libros de texto solo dan una visión muy particular de la realidad. El alumnado debe aprender a investigar, a curiosear y a discenir entre lo que les gusta y no les gusta, entre lo qué es válido y lo qué no, y eso no se hace a través de un libro de texto, sino a través de la experimientación.
    Por otro lado, pienso que las generaciones de futuros/as profesores/as están llenos/as de ideas innovadoras y de creatividad que sobresalen del mero libro de tecto y es importante que se puedan desarrollar en las aulas.
    En definitiva, debemos de construir, y no de sguir los caminos ya marcados. De esta manera, las clases, la educación, las relaciones serán motivadoras en todos los sentidos.

    ResponderEliminar